Teoría del ciclo de vida

Teoría del ciclo de vida es un conjunto de relatos, dividido en cuatro partes más una intro:
1.- Perversidad 2.- Everest 3.- Ficción 4.- Así

miércoles, 24 de marzo de 2010

Los capítulos

Siempre se me ha dado fatal dar nombre a los capítulos, incluso saber cuándo llega el momento de un nuevo capítulo. En esta novela en obras no tengo ese problema. Cada capítulo es un nuevo momento en el diario que su protagonista escribe rememorando su pasado, y cada título es la primera frase de su nueva reflexión. Así, algunos de esos capítulos son

1.- Virginia revuelve sus dedos entre mi pelo mojado.
2.- Hubo un tiempo en que la felicidad asomó.
3.- Recuerdo especialmente aquella noche.
4.- Acaba de amanecer, Virginia, con tus ojos apuntando al sol.
5.- Ella admiraba a The killers.
6.- El caminar se hace sincero cuando tu paso y mi paso se encuentran.
7.- Y allí la dejaba, al borde de la piscina.
8.- Desperté tarde y no supe del devenir del mundo en mucho tiempo.
9.- Hablamos de ti aquel sábado, y ahora hablamos de Elisa este sábado.
10.- Necesito dormir aunque no sea contigo al lado.
11.- Desperté y aún no habías llegado.

Páginas: 12
Libro de referencia: La peste, de Albert Camus.
Canción de referencia: La trama y el desenlace, de Jorge Drexler.

lunes, 15 de marzo de 2010

Delibes, el tiempo y la distancia

De La sombra del ciprés es alargada, la novela que cambió mi forma de ser y pensar, extraigo esta martavillosa reflexión sobre la lejanía y el tiempo.


"Con relativa frecuencia recibía cartas de Jane. Ella me escribía todos los días, pero su correspondencia llegaba en montoncitos de diez o doce cartas que yo seleccionaba por orden de fechas antes de empezar a leerlas. Sus misivas suponían para mi impaciente soledad un gran consuelo. […]

Me hablaba de sus esperanzas y proyectos; de cómo había construido un calendario con veinticuatro cuadritos blancos en cada día y del placer confortante que suponía el tachar cada mañana las nueve horas de sueño. “Es un calendario –me explicaba-, que llevo siempre conmigo y donde quiera me sorprendan las campanadas de un reloj lo saco para tachar cada uno de los cuadritos blancos.

Es un placer tan simple y reconfortador que te lo recomiendo con toda el alma. De esta manera casi ves pasar el tiempo; y un tiempo que sería odioso normalmente, se transforma así en una cosa simpática porque te permite ir disfrutando paso a paso del camino que conduce a nuestra reunión definitiva."

Páginas: 8
Libro de referencia: La sombra del ciprés es alargada, de MIguel Delibes.

martes, 9 de marzo de 2010

El día de la mujer personaje

En la novela en obras hay dos protagonistas: Virginia y Elisa. Elisa es la que forma parte de la familia descrita en anteriores entradas. Virginia es amiga de su hermano, pero pronto formará parte del infierno familiar. Desde la primera recreación, incluso la primera palabra es Virginia, en ese comienzo ya dejado aquí: "Virginia revuelve sus dedos entre mi pelo mojado".

Pensando en mujeres protagonistas, me surgen cuatro: Andrea, Jordan, Dolores y Maggie. Andrea, de Nada, de Carmen Laforet, la chica que descubre un nuevo mundo en su desplazamiento a Barcelona a estudiar. Jordan es Jordan Baker de El Gran Gatsby, personaje totalmente secundario, pero que siempre me fascina. Dolores es Dolores Haze de Lolita, la sensualidad hecha infierno. Y Maggie, es Maggie la gata de La gata sobre el tejado de zinc caliente, la luchadora que trata de sostener una familia.

Páginas: 8
Libro de referencia: Un tranvía llamado deseo, de Tennessee Williams.

miércoles, 3 de marzo de 2010

Más sobre la familia

La familia se convirtió en una obsesión de Tennessee Williams, plasmando en ella todo el dolor provocado años atrás. Por ejemplo, en El zoo de cristal o en De repente el último verano, reconocemos perfectamente a su hermana, descrito sutilmente en dos personajes fascinantes. Pero el culmen familiar llega con La gata sobre el tejado de zinc caliente, obra maestra del teatro y también del cine.

Una pequeña reflexión prestada. No es mera casualidad que muchos de los textos dramáticos más memorables del teatro norteamericano, desde Largo viaje hacia la noche hasta El niño enterrado, pasando por Muerte de un viajante y Quién teme a Virginia Woolf, describan tensiones familiares y enajenaciones, el toma y daca de las guerras domésticas. En realidad, la venerable tradición de dramatizar los conflictos familiares no es en modo alguno únicamente norteamericana: el tema trasciende las culturas, es anterior al Hamlet de Shakespeare y se remonta al teatro de Esquilo. Ciertamente, Tennessee Williams se percató de que situar la crisis del corazón en el seno de la familia proporcionaría material más que suficiente para conseguir la empatía del público y su catarsis, puesto que la mayoría puede identificarse con facilidad con esos niveles de conflicto emocional.

Robert Bray, introducción de El zoo de cristal, de Tennessee Williams. Artes escénicas/Obras. 2007.

Páginas: 7
Libro de referencia: El zoo de cristal, de Tennessee Williams.
Canción de referencia: Todo lo que no, de LKan.